Los perros se encuentran entre los animales más puros del planeta. Los más mínimos acontecimientos cotidianos, como salir a caminar o ver a mamá o papá llegar a casa del trabajo, son siempre fuente de inmensa emoción para nuestros amigos caninos.
La mayoría de los perros estarían de acuerdo en que no hay nada mejor que explorar la naturaleza, pero para algunos es más difícil que para otros.
A los perros discapacitados les resulta difícil cruzar terrenos que la mayoría de los perros pueden hacer sin pensar.
Los terrenos accidentados, la vegetación profunda y las masas de agua son cosas prohibidas para las sillas de ruedas caninas.
Las playas, con sus kilómetros de arena y mar, también pueden estar fuera de discusión, lo cual es triste porque a la mayoría de los perros les gusta ir a la playa.
¿Conoces esa indescriptible sensación de felicidad que sientes en la playa? Los perros, en cambio, lo experimentan diez veces más intensamente.
So Salima Kadaoui was determined that her 18 disabled dogs would get to enjoy the beach like every other dog could.
In Tangiers, Morocco, Salima built SFT Animal Sanctuary. Several of the dogs she rescues have lifelong injuries as a result of being hit by cars and abandoned.
Thankfully, Salima rarely gives up on her dogs, knowing that they can still live life to the fullest if they can adapt to a new way of life.
On July 4, she exhibited the potential of rehabilitation by bringing some of her dogs on a day trip.
Despite having only their front legs working, the dogs raced beside Salima from one end of the beach to the other.
Imagine sleeping down on the beach and hearing a ruckus, only to glance up to find 18 dogs in wheelchairs racing along the sand!
On the beach, there are dogs of various sizes, from a tiny corgi to a giant german shepherd. It’s astonishing how much of a life-saving device the doggy wheelchair has been.
It makes little difference that these dogs cannot use their back legs since, with their wheels in place, they can run as quickly as their non-disabled counterparts.
There’s even room for a little levity! A corgi steals Salima’s shoe and shakes it about in her mouth before returning it to its proper owner.
Another video of the dogs racing down the beach shows one naughty dog placing the wheel of his friend’s wheelchair in his mouth – yet they’re still going full speed!
This certainly appears to be a fun-loving pack, and it’s wonderful that Salima has been able to provide these pups with the life they deserve.
One thing is certain: these dogs aren’t down on themselves.
Pueden enseñarnos a los humanos algunas cosas sobre la vida. ¿Cuántos de nosotros, incluso aquellos sin discapacidades, nos comparamos con los demás y nos encontramos deseando cosas que no tenemos?
Deberíamos ser más como estos perros, amar lo que tenemos sin pensar en lo que no tenemos.
El vídeo de Salima y sus cachorros tiene aproximadamente 1500.000 visitas.
En declaraciones a Story Trender sobre su misión de rescate, Salima dijo: “Tenemos aproximadamente 600 animales en total en el Santuario, incluidos perros, gatos, burros y monos”.
¡Debe tener mucho en su plato! Pero qué carrera tan satisfactoria debe ser esa.
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